Adiós a los 100km/h en carreteras convencionales
Nuevas modificaciones para las denominadas carreteras convencionales que tienen por objetivo reducir la siniestralidad.
La Dirección General de Tráfico (DGT) espera reducir un 10% anual los muertos en accidentes en las carreteras convencionales con la reducción de 100 a 90 km/h del límite máximo de velocidad en las mismas.
Cuando hablamos de carreteras convencionales, nos referimos a aquellas que no tienen separación en los sentidos de circulación-
Así lo ha dicho a los periodistas el director general de Tráfico, Pere Navarro, en Collado Villalba tras asistir al cambio de la última señal de limitación de 100km/h por la de 90.
La velocidad es la causa de los accidentes de mayor gravedad
Pere Navarro ha recordado que en 2018 murieron casi novecientas personas en estas carreteras convencionales y estima que con esta medida “deberíamos ser capaces entre todos de reducir un diez por ciento la cifra, es decir, noventa muertos menos cada año”.
Por ello ha pedido “a todos los conductores su colaboración para cumplir estos nuevos límites de velocidad en las carreteras convencionales”, que totalizan 14.419 km.
Navarro ha advertido que exceder este límite hasta 120km/h conlleva sanción económica pero a partir de 121 incluye pérdida de puntos, entre dos y seis según el exceso.
Ha recordado que la velocidad es la causa de los accidentes de mayor gravedad y que se va a reforzar la vigilancia y se va a estudiar la posibilidad de poner más radares para reducir la siniestralidad en estas carreteras.
Esta bajada de velocidad se produce en aquellas vías en las que se registra el mayor número de víctimas (en torno al 75-80% de media en los últimos 5 años) y en las que la velocidad es un factor concurrente en los siniestros.
Víctimas en accidentes
En 2017, de las 1.321 víctimas mortales en accidentes de tráfico en vías interurbanas, 1.013 lo fueron en carreteras convencionales.
En 2018 fallecieron 877 personas en estas carreteras siendo el accidente más frecuente la salida de la vía, el 40 por ciento, seguido por colisiones frontales, el 27%, y muchos siniestros estuvieron relacionados con pérdidas de control por exceso de velocidad, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT).
El director general de Tráfico ha aclarado que los camiones de más de tres toneladas y media tendrán el límite en 80.
Los autocares “por la baja siniestralidad y por los buenos resultados que están dando van a poder ir a 90” con lo que “por primera vez se ponen al mismo nivel de velocidad máxima que automóviles y motocicletas”.
Señales
Por su parte, el director general de Carreteras, Javier Herrero, ha explicado que se han cambiado 2.790 señales con un coste de 650.000€.
“Por primera vez en los presupuestos generales del Estado la partida para mantenimiento y seguridad es superior que la de nueva construcción” en estas infraestructuras, ha destacado.
Ha añadido que además se han instalado señales con mejores materiales, de fibra de carbono, que favorecen su visibilidad.
“Estamos dando un impulso muy importante en aras a aumentar bajo todos los puntos de vista la seguridad en las vías, tanto en el firme y la señalización, así como en la revisión de puentes y viaductos y en la implementación de nuevas medidas de seguridad en túneles”, ha recalcado.
Reducir la siniestralidad
Según informa la DGT, el principal objetivo de la reducción de este límite de velocidad es reducir la siniestralidad vial y cumplir el objetivo establecido en la estrategia 2011-2020 de bajar de 37 la tasa de fallecidos en accidente de tráfico por millón de habitantes (En 2017 fue de 39).
Además, converger con Europa donde se han ido adoptando medidas de reducción de las limitaciones de velocidad en este tipo de vías, siendo la tendencia mayoritaria los 90km/h, aunque algunos países ya han apostado por los 80, como Suecia y Holanda, referentes en seguridad vial.
Fuente: EFE